El taxi es un medio de transporte público ofrecido por los ayuntamientos con tarifas reguladas que consiste en un vehículo de transporte con conductor con una autorización de transporte (VT) y una licencia del ayuntamiento, que ofrece servicios de transporte de una persona o un grupo pequeño de pasajeros dirigidos a igual o diferentes destinos por contrato o dinero. Usualmente, los lugares donde se recoge y se deja al pasajero se deciden por el proveedor (oferente), mientras que en el caso del taxi, el usuario (demandante) los determina. Es decir, a diferencia de los otros tipos de transporte de personas, como son las líneas del metro, tranvía o del autobús, el servicio ofrecido por el taxi se caracteriza por ser puerta a puerta.
Etimología
La palabra « taxi », según el Diccionario de la lengua española, es una forma abreviada de la palabra «taxímetro», que a su vez deriva del griego τάξις, «tasa» y μέτρον, que significa «medida».
Historia
En la edad media ya existía el arrendamiento de mulas y también los transportistas eran un gremio especializado en la época. En el siglo XVII, en Londres y París existían empresarios especializados en la cría de caballos y mulas para el alquiler.
Generalidades
En el caso de transporte urbano, un taxi es un medio de transporte que permite desplazamientos rápidos, confortables y directos principalmente en áreas urbanas. El usuario paga una tarifa al conductor, (tarifa que estipula el ayuntamiento, nunca el taxista), a cambio del servicio de transporte prestado. Provee un servicio flexible y conveniente, por lo que es uno de los sistemas de transporte no subvencionado. A diferencia de los sistemas de transporte colectivo, como metro, BRT, tranvía o bus, en los que existen unos principios generales para su diseño, regulación y operación, los sistemas de taxis son mucho más complejos y tienen muchas más variables a ser consideradas y muchos más actores.
La demanda es servida por la combinación de servicios prestados a través de los tres segmentos: despacho, calle y contrato. Sin embargo, los segmentos por despacho y en la calle son los predominantes.
Por el segmento de despacho: solicitado por teléfono o aplicación móvil, a una central, presta el servicio puerta a puerta, en zonas donde conseguir un taxi en la calle es difícil, durante la noche, por la baja demanda, o por seguridad.