El conejo de Florida (Sylvilagus floridanus)[1] también conocido como el conejo castellano, es una especie de mamífero lagomorfo de la familia Leporidae. Es una de las especies de conejo más comunes de Norteamérica y se extiende hasta Venezuela. Es de un color de marrón -rojizo o marrón -grisáceo, tiene unas grandes patas posteriores, orejas largas y una cola corta y esponjosa, de color blanco. La parte del vientre es blanca. El conejo adulto pesa en promedio 1.2 kg y mide 43 cm de largo. Se alimenta de una muchas especies de plantas, hierbas, arbustos y árboles dependiendo del alimento que este disponible.[2] En estado natural su vida promedio es de 15 meses aunque en cautiverio pueden vivir más de 10 años.[2] Es uno de los conejos llamados ' conejos cola de algodón '.
Reproducción
La época reproductiva de S. floridanus varía dependiendo de la región, en lugares con épocas de fríos marcadas se reproducen cuando las condiciones son óptimas ( verano ) mientras que en las zonas cálidas pueden reproducirse todo el año. Tienen tazas de reproducción muy altas llegando a procrear 35 conejos por hembra anualmente. Pueden tener camadas de 1 a 7 conejos y hasta 7 camadas por año.[2]
Distribución
El conejo tiene una amplia distribución natural abarcando el este de norte América y parte norte de américa del sur,[1] es la especie con mayor distribución del género.[2] También se ha introducido en el noroeste de Estados Unidos y noroeste de Italia como presa para los cazadores y se ha logrado establecer en estas regiones.[3] Habita en distintos ambientes incluyendo bosques, pastizales, desiertos y campos de cultivo en altitudes desde 0 hasta más de 3000 msnm.[2]
Ecología
El conejo castellano tiene una gran importancia ecológica[4] ya que se alimenta de muchas especies de plantas y es alimento para una gran variedad de animales carnívoros.[2] Debido a que tienen tasas de reproducción muy altas y se adaptan a diferentes ambientes pueden convertirse en especies invasoras. Dentro del área natural de distribución estos animales son muy comunes y es normal encontrar densidades de 8 - 10 conejos por hectárea.[2]
Se ha visto que los depredadores de mayor importancia para los conejos son los mamíferos que son responsables de más del 50% de las muertes.
