En cinematografía y fotografía, la exposición múltiple consiste en la creación de una imagen mediante la superposición de múltiples imágenes obtenidas en diferentes exposiciones. Esta técnica se puede utilizar para crear imágenes "espectrales", para agregar objetos o personas originalmente ausentes, o para otros tipos de fotomontaje.
Las formas en que se produce esta superposición pueden variar según las tecnologías de disparo utilizadas. En la fotografía analógica, por ejemplo, la superposición se logra evitando el avance de la película después del rodaje; esto siempre es posible en cámaras con avance manual de la película, mientras que para aquellos con avance automático se requiere una función explícita para deshabilitar el progreso, disponible en cámaras avanzadas. En las cámaras digitales, el sensor debe realizar diferentes exposiciones antes de generar la imagen digital final.
El principal problema con esta técnica, ya que la película o el sensor se impresiona varias veces, es el riesgo de sobreexposición. Por esta razón, es mejor fotografiar en condiciones de luz media -baja. Si la intención es que las sobreexposiciones reanuden la misma escena, es necesario usar un trípode para asegurarse de que el marco no cambie entre las diferentes exposiciones.
Un resultado similar al obtenido por la exposición múltiple, o la superposición de imágenes en otros, también se puede obtener a través de programas de edición de fotos, alterando la opacidad de las dos imágenes y superponiéndolas.
Otros proyectos
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Enlaces externos
( ES ) Exposición múltiple, en Encyclopaedia Britannica, Encyclopædia Britannica, Inc.
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