En la cultura europea y occidental, así como en la cultura global contemporánea, el prototipo de vampiro más popular es el de origen eslavo, es decir, el de un ser humano convertido después de morir en un cadáver activo o retornado depredador chupador de sangre.
Es probable que el mito del vampiro en el folclore de muchas culturas desde tiempos inmemoriales, provenga inicialmente de la necesidad de personificar la " sombra ", uno de los arquetipos primordiales en el inconsciente colectivo, según la conceptualización de Carl Gustav Jung, y que representa los instintos o impulsos humanos reprimidos más primitivos. Así, sería la encarnación del mal como entidad y una representación del lado salvaje del hombre o de su atavismo bestial, latente en su sistema límbico y en conflicto permanente con las normas sociales y religiosas.
Aun así, el mito tal como es conocido en nuestros días proviene, además del citado temor a los bajos instintos, de una compleja combinación de varias supersticiones, entre las que se incluyen las creencias sobre la sangre (a la que se atribuye el ser fuente de poder o vehículo del alma ); el temor a la depredación, a la enfermedad y a la muerte ( de la cual la expresión más palpable es el cadáver), así como fascinación temerosa por la inmortalidad y el instinto de supervivencia..
Algunos estudiosos sugieren que el mito del vampiro, sobre todo el que se popularizó en Europa después del siglo XVII, se debe en parte a la necesidad de explicar, en un contexto de pánico colectivo, las epidemias causadas por enfermedades reales que asolaron Europa, antes de que la ciencia lograra explicarlas racionalmente (Ver: Vampiro y Medicina ).
" Vampiro " es una palabra que comenzó a ser usada en Europa en el siglo XVIII. En el Diccionario de la lengua española, de la Real Academia Española, fue incluida por primera vez en la novena edición, de 1843. Tiene origen en el término "vampire" del inglés y francés, proveniente a su vez del término vampir en lenguas eslavas y del alemán, derivado del polaco wampir y este a su vez del eslavo arcaico oper, del cual existen raíces indoeuropeas paralelas en el turco y el persa. Significa a la vez: "ser volador ", " beber o chupar" y " lobo ". Por otra parte, hace también referencia a cierto tipo de murciélago hematófago.
Según el Diccionario Oxford de Inglés, la primera aparición de la palabra "vampire" ( vampiro, en inglés) fue en 1734, en un diario de viaje titulado Travels of three English gentlemen ( Viajes de tres caballeros ingleses), publicado posteriormente en el "Harleian miscellany" en 1745.
El término inglés deriva (posiblemente a través del "vampyre" francés) del "vampir" alemán, que aparece a principios del siglo XVIII proveniente del término serbio "вампир/vampir. La voz serbia wampira (wam = sangre, pir = monstruo ) designa al muerto que, según leyendas de la Europa Central, regresa a alimentarse con la sangre —y, según ciertas variantes, con la carne — de los seres que en vida estuvieron más próximos a él.