Abadía - rompecabezas en línea
Una abadía es un monasterio o convento cristiano bajo las órdenes de un abad o una abadesa, que son el padre o la madre espiritual de la comunidad. Un priorato solo difiere de la abadía en que el monje superior lleva el título de prior en lugar de abad. Los prioratos eran originariamente ramificaciones de las abadías, y los priores continuaban siendo subordinados a los abades; sin embargo, la distinción actual entre abadías y prioratos se perdió en el Renacimiento.
Historia
Las más antiguas comunidades monásticas conocidas consistían en "células" congregadas alrededor de un centro común, el cual era normalmente la casa de un ermitaño o anacoreta famoso por su santidad o su ascetismo singular, pero sin intenciones de organización formal. Tales comunidades no son una invención del cristianismo. Ya se había producido un ejemplo, al menos en parte, por los esenios en Judea y quizás por los therapeutae, una orden monástica establecida al pie del lago Mareotis, cerca de Alejandría en el Egipto Ptolemaico.
En las épocas más tempranas del monasticismo cristiano, los ascetas acostumbraban a vivir aislados, independientemente unos de otros, no lejos de alguna iglesia local, manteniéndose del trabajo de sus propias manos y repartiendo el sobrante una vez habían satisfecho sus frugales necesidades. El incremento del fervor religioso, ayudado por la persecución, los alejó cada vez más de la civilización hacia las soledades montañosas o desiertos solitarios. Los desiertos de Egipto se enjambraron con las "células" o chozas de estos anacoretas. Antonio el Grande, que se había retirado a la Tebaida egipcia durante la persecución por Maximiano (312), fue el más celebrado de ellos por sus austeridades, su santidad y su poder como exorcista. Su fama congregó alrededor de él una hueste de seguidores imitando su ascetismo en un intento de imitar su santidad. Cuanto más se retiraba a terrenos salvajes, más numerosos eran sus discípulos.